Tengo un porrón de años y conciertos cargados en mi debilucha espalda y nunca había tenido una entrada tan fea como la que me dieron el otro día para ver a este señor. Diréis que es una frivolidad, pero una que es romántica las guarda todas y estoy segura que esta en concreto chirriará mucho entre el resto de la colección.
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